JAVIER JIMENEZ
Un locutorio ubicado s'Arenal, en Palma de Mallorca, era, en realidad, un laboratorio clandestino para la producción en masa de CD falsos. La Policía Local ha detenido a un senegalés y se ha incautado de 3.216 discos piratas, 65.462 gafas de sol de imitación, 99 relojes, cuatro «tostadoras» y 18 grabadoras. La intervención policial de la Unidad Nocturna se produjo en la medianoche de ayer, cuando los agentes tuvieron suficientes indicios inculpatorios y accedieron al locutorio, donde se descubrió toda una red de producción ilegal.

Con el material que se encontraba en poder del ciudadano subsahariano se podían confeccionar un total de 300 CD falsos en sólo una hora, lo que da una idea del fraude a la industria discográfica. Entre los útiles para la venta ambulante de los compactos se ha precintado también una guillotina de cortar papel y una fotocopiadora láser de color. Las grabadoras estaban conectadas las 24 horas del día y la policía tiene la certeza de que el senegalés detenido iba facilitando el material ilícito a distintos vendedores ambulantes, que recogían los discos y los ponían a la venta en diferentes puntos de la Platja de Palma. De hecho, la operación de ayer se enmarca en las últimas actuaciones contra los delitos relacionados con la propiedad intelectual y, en concreto, en la lucha contra la piratería de CD.