Investigaciones llevadas a cabo por el equipo de Policía Judicial de la Guardia Civil de Eivissa han permitido descubrir un desfalco de cerca de 64.000 euros presuntamente cometidos por una auxiliar administrativa de una empresa de congelados ubicada en la carretera del aeropuerto, en Sant Jordi. La sospechosa, una chilena de 43 años identificada como Victoria F.U., se apropió presuntamente del dinero acuciada por las deudas que ella personalmente había contraído, según la información recogida por este periódico. Las sustracciones de dinero se estaban produciendo desde hacía trece meses. El trabajo de la Guardia Civil ha servido no sólo para detener a la sospechosa sino también para aclarar que la estafa era mucho mayor de lo que, en un principio, se barajó dentro de la empresa. La Guardia Civil recibió justo hace un mes -el pasado 12 de marzo- una denuncia del administrador de la empresa afectada, «Exclusivas Montiel», en la que se alertaba de la sustracción de reiteradas de pequeñas cantidades de dinero en la firma. El denunciante informó de la falta de al menos 17.000 euros. Fue entonces cuando agentes de Policía Judicial se encargaron de estudiar detalladamente la contabilidad de la empresa y de examinar cómo se estaban aplicando los programas informáticos de facturación con los que contaba la sociedad afectada. El análisis de estas cuentas llevó hasta Victoria F.U., quien trabajaba como auxiliar administrativa en las oficinas de «Exclusivas Montiel». Las gestiones posteriores llevadas a cabo por la Guardia Civil, profundizando en la contabilidad, valieron para descubrir que la sospechosa presuntamente se estaba apropiando de cantidades desde enero de 2003.