Los dos casos se resolvieron ante la responsable del juzgado de lo Penal número 2 de Eivissa, Martina Rodríguez, después de que los acusados se reconocieran autores del delito que se les imputaba y se llegara a una sentencia de conformidad.

El camionero que circulaba bebido con un trailer de butano, procedente de Barcelona y no relacionado con ninguna de las distribuidoras de gas butano de la isla, era el que más se jugaba.

Éste se enfrentaba hasta cuatro años sin permiso de conducir después de que la Guardia Civil del Tráfico le sorprendiera el último día de marzo con síntomas de ir bebido y arrojara en sendas etilometrías que se le practicaron tasas de 0,70 y 0,68, como ya informó este periódico. La ley sólo permite niveles de 0,15 para quienes transportan mercancías que se consideran peligrosas declaradas así por su naturaleza o conductores que trasladan viajeros en autobuses.