Los dos inmigrantes se presentaron en el retén de la Policía Local de Eivissa a primera hora de la madrugada.

Los dos ecuatorianos, un hombre de 47 años y su compañera sentimental, una mujer con la que actualmente no convivía, llegaron al retén de la Policía Local de Eivissa sobre la una de la madrugada de ayer explicando que querían denunciarse mutuamente tras haber tenido una pelea doméstica en presencia de su hija, una niña de cuatro años. Se da la circunstancia de que el hombre contaba con un mandamiento judicial que le impedía acercarse a la mujer, según informaron fuentes policiales.

Éste, sin embargo, aseguró que era ella -ahora con domicilio en otro lugar de Eivissa- la que había ido a su casa y, por tanto, la responsable del encuentro.

A.F.C. presentaba en ese momento varios cortes. Según su relato, su pareja, I.D.D., le había agredido con un cuchillo. Ésta, por contra, aseguró que sólo le había golpeado con un frasco de perfume durante la pelea, supuestamente ocurrida en un piso cercano a las dependencia policiales y lugar donde el sospechoso tenía su residencia.

Agentes de la unidad nocturna de la Policía Local acudieron posteriormente a dicho domicilio. Todo ello, después de que la pareja comunicara que en la casa habían dejado sola a una niña de cuatro años, menor que, al parecer, fue testigo de la reyerta.

Tras su entrada en la casa, los agentes confirmaron la presencia de la pequeña en el inmueble. Asimismo, los policías se incautaron de un frasco de colonia que, según los indicios recogidos en el lugar de los hechos, pudo ser utilizado en la agresión. Los policías, sin embargo, no hallaron ningún cuchillo manchado de sangre. Ambas personas fueron posteriormente trasladas aun centro médico y luego a Comisaría para que interpusieran su denuncia, así como para que el Cuerpo Nacional de Policía realizara con ellos las gestiones que se consideraran oportunas.