El juez José Espinosa, quien debía decidir sobre las agresiones que se produjeron cuando dos dotaciones del 061 intervinieron el pasado mes de enero en un domicilio de sa Carroca, ha considerado que existieron especiales circunstancias en lo ocurrido y, por ello, ha estimado conveniente imponer la mitad de la multa que se pedía al matrimonio implicado. Asimismo absuelve al médico que propinó un bofetón a la paciente para contener su estado de «histeria».

La causa, de este modo, queda resulta con una multa de 270 euros por tres faltas de lesiones para la pareja que provocó el incidente cuando uno de ellos, a causa de una dolencia cardiaca de su mujer, requirió asistencia sanitaria el pasado 13 de enero, incidente que concluyo con cuatro operarios del 061 heridos tras perder los nervios la afectada y su marido. Éste último, como ya se informó, propinó un cabezazo al médico al ver cómo el facultativo abofeteaba a su esposa después de que ya se hubieran producido momentos de mucha tensión en la intervención.

En el juicio, los sanitarios afectados renunciaron a cualquier tipo de indemnización, pero hicieron un llamamiento público para que no se volvieran a producir situaciones como la vivida por ellos, que actuaron desprotegidos hasta que llegaron unidades de la Policía Local de Sant Josep y de la Guardia Civil que minutos antes habían sido reclamadas a su central de emergencias.

La sentencia del juez Espinosa , por ultima, señala que el médico agredido tiene la posibilidad de emprender acciones civiles o criminales contra un hijo de los acusados, persona que no fue juzgada al no estar citada, pero que supuestamente amenazó de muerte al facultativo durante estos mismos hechos. El médico, una enfermera y otros dos operarios del 061 se encontraron con una mujer «obsesionada por no ser hospitalizada y muy agresiva» después de que ésta hubiera sufrido una experiencia traumática durante una anterior convalecencia en Son Dureta. Pese a que la mujer fue sedada y prometió colaborar, volvió a atacar a los sanitarios cuando se le iba a hacer un electrocardiograma sufriendo éstos codazos, mordiscos y otros lances.