EFE / BARCELONA

El Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) investigará el caso de la juez de instrucción de Barcelona que advirtió a los Mossos d'Esquadra de su cargo para librarse de que le practicaran un test de alcoholemia, en el que finalmente arrojó un resultado de 0,48, casi el doble del máximo permitido. Según han informado fuentes del Tribunal Superior de Justicia de Cataluña (TSJC), la presidenta del alto tribunal, Maria Eugenia Alegret, recibió el pasado viernes día 21 por correo electrónico una comunicación de la policía autonómica que le informaba del caso y ha acordado remitirlo al CGPJ para que investigue la actuación de la juez, M.S.L.M.

El incidente sucedió el pasado 9 de octubre, cuando la juez intentó saltarse un control de alcoholemia en la carretera C-16 a su paso por Sant Cugat del Vallés (Barcelona), avisando a los Mossos de su cargo y advirtiéndoles de que los esperaba cuando pasaran por su juzgado.