El delegado de CSI-CSIF en los Juzgados de Eivissa, Juan Nieto, concertó ayer una conferencia de prensa en la que anunció de forma oficial que a partir de ahora trabajará en exclusividad para el sindicato con el objeto de lograr la máxima presión sobre el Ministerio de Justicia para que subsane las deficiencias que este sector público padece en la isla.

Mientras se aclara el futuro de Eivissa Centre, proyecto dentro del cual se enmarca la construcción de un nuevo edificio judicial, Nieto confía en que la Gerencia Territorial del Ministerio de Justicia en Balears actúe y subsane problemas de la sede de la isla tras la revisión efectuada por la dirección general de trabajo, que se desplazó a la isla en julio y regresó anteayer para revisar el estado de algunas zonas.

En otras zonas, visitó la ubicación del rack, un armario que alberga parte de las conexiones informáticas de los juzgados y junto al que se ven obligadas a trabajar varias funcionarias del Juzgado de Penal 2, lo que les causa cefaleas, mareos y alergias. «Confiamos en que esta inspección nos dará la razón y cambien la máquina de lugar», dijo Nieto.

El delegado de CSI-CSIF señaló que durante la inspección también se realizó una visita a los sótanos, donde está el archivo, «joya de la corona» del Juzgado, ironizó Nieto: «Hace un mes no pudimos bajar porque había ardido un cuadro y ayer [por anteayer] estuvimos el mínimo tiempo posible». «Queremos», dijo, «un sistema anti incendios y una salida de emergencia, queremos condiciones dignas», denunció Nieto.

Por el edifico de los Juzgados de Eivissa pasan unas mil personas de media cada día y no cuenta con salida de emergencia. Un incendio en las plantas inferiores dejaría aislados los pisos superiores.