La policía ha vuelto a detener en Eivissa a un residente marroquí por una nueva agresión con arma blanca cinco año años después de que supuestamente intentara acabar con la vida de otra persona que tuvo que ser atendida en Can Misses. Un año después esta misma persona fue capturada por no respetar la orden que le impedía acercarse a la víctima, persona que recibió una puñalada en el cuello y otra en el tórax durante una reyerta.

A.L., natural de Tánger y de 51 años, fue apresado en esta ocasión en ses Figueretes por supuestamente acuchillar a un joven al que recriminó que aparcara su moto en una zona de la calle que el sospechoso consideraba como suya, según fuentes policiales. El afectado logró desarmar al acusado y, herido con un corte en la cara, pudo retenerlo hasta que le auxilió una dotación de Comisaría que circulaba por la calle Ramón Muntaner. En el momento de su arresto, A.L. profirió amenazas de muerte contra su víctima, según el atestado.

El suceso tuvo lugar en la calle Juan Ramón Jiménez. Varias personas alertaron a una dotación que patrullaba la zona de una violenta pelea. Los agentes se incautaron de una navaja y un destornillador que el perjudicado supuestamente pudo quitar al agresor. Averiguaciones posteriores resolvieron que la moto cuestión de litigio había sufrido daños y había sido movida de sitio en otras ocasiones al considerar A.L., que sólo él tenía derecho a aparcar en ese lugar.