Una conductora de nacionalidad alemana de 43 años, fue detenida por la Policía Local de Eivissa después de que fuera sorprendida bebida y, supuestamente con actitud violenta, se negara a someterse a una etilometría cuando presentaba claros síntomas de ebriedad. Dicho suceso ocurrió cuando una dotación intervino por un accidente registrado anteayer tarde en la avenida de Sant Josep cuando el coche de la sospechosa alcanzó por detrás a un ciclomotor. La mujer viajaba con dos de sus hijos, de cinco y siete años de edad. Los pequeños fueron entregados a un familiar al estar el padre fuera de la isla, mientras A.B. era llevada a Comisaría por presuntamente agredir también a un agente, según fuentes de la Policía Local de Eivissa.

El siniestro con el ciclomotor se saldó con dos heridos de carácter reservado.