JK5022: despegue mortal

Las 154 víctimas del accidente de Spanair serán recordadas hoy, justo cuando se cumple un año desde la tragedia, en diversos actos que tendrán lugar en el aeropuerto de Madrid-Barajas, donde se estrelló el avión, y en el aeródromo de Las Palmas de Gran Canaria, donde debería haber aterrizado el JK5022, el 20 de agosto de 2008.

Así, en Madrid-Barajas se celebrará a las 11.30 horas una misa en el jardín de la terminal T-2 del aeropuerto, oficiada por el sacerdote de la capilla del aeropuerto.

En Las Palmas de Gran Canaria, a las 11.00 horas, está previsto que los familiares de las víctimas visiten El Confital, donde se habrá colocado previamente una placa conmemorativa, en la que aparecerá una frase elegida por los socios igual a la de Madrid, en memoria de los fallecidos y heridos.

En cuanto a las causas de la tragedia, supervivientes, familiares y allegados de las víctimas confían en que la Justicia determine las causas del siniestro para evitar que «esta situación se repita y otras personas pasen por este dolor».

Éste es el deseo de José Pablo Flores, madrileño, conductor del SAMUR, y uno de los supervivientes del siniestro, que volaba a Gran Canaria para visitar a un hermano el 20 de agosto de 2008.

En el avión viajaba con su mujer, que sufrió heridas graves, y su hermana, que falleció.

Flores no ha vuelto a volar desde aquel día, porque no confía en la seguridad aérea y porque no quiere volver a tener «la misma sensación» de hace un año, aunque recuerda que otros supervivientes del accidente han vuelto a subir en aviones.

Confianza

Por su parte, el portavoz de la Asociación de Afectados del Vuelo JK5022, Javier Rodríguez Torres, expresa su «plena confianza en el proceso judicial».

En cuanto a la investigación del accidente, recalca que se centra en las causas que habrían originado el desplome del avión, pero no en otros hechos que, a su juicio, no se desarrollaron convenientemente.

Se refiere a «algunas deficiencias en el plan de emergencias activado tras el siniestro, como la tardanza entre 35 y 40 minutos de las ambulancias».

Por ello, Rodríguez recuerda que la asociación ha abierto un grupo paralelo de investigación de las causas del accidente y «ya conocemos muchas cosas. Creemos, además, saber quiénes pueden ser los responsables del siniestro».

«Ahora necesitamos pruebas para poder introducir estos datos en el sumario», destaca el portavoz, mientras agradece el apoyo que les ha prestado el Cabildo de Gran Canaria y el Ayuntamiento de Madrid, y no oculta sus críticas al Gobierno de la comunidad madrileña.

La asociación ha afirmado a raíz de los datos que han trascendido sobre las causas del accidente, que los fallos humanos se pueden perdonar, pero que no se pueden «pasar por alto» los errores técnicos que causaron el siniestro.

«Por las noticias que hemos escuchado, sólo puedo decir que nosotros perdonamos los fallos humanos, porque en un momento dado los cometemos todos. Pero los técnicos nunca podremos pasarlos por alto», según manifestó la secretaria de la Junta Directiva de la Asociación, Margarita Henríquez.