Un juez de Florida (EE.UU.) ordenó que se practiquen nuevas pruebas de huellas dactilares el próximo 14 de septiembre a un sospechoso de los asesinatos por los que fue condenado a muerte el español Pablo Ibar, en el corredor de la muerte en Estados Unidos desde el año 2000. No obstante, Jason Pensky, abogado del sospechoso, William Ortiz, dispondrá hasta el próximo 9 de septiembre para presentar cualquier alegación a la decisión del juez que preside el caso en un tribunal de Fort Lauderdale (norte de Miami), Jeffrey Levenson.

Ortiz, de 37 años y origen puertorriqueño esta condenado a cadena perpetua en una cárcel del estado de Florida por otros crímenes. Debido a razones personales, Pensky no compareció en la vista judicial y lo hizo en su lugar, cuarenta minutos más tarde de la hora fijada, Philip Kim, socio del letrado de Ortiz.

En la breve audiencia, Levenson concedió a Kim de plazo hasta el próximo 9 de septiembre para que «presenten cualquier moción» sobre la prueba de huellas dactilares que se realizará cinco días más tarde a Ortiz.

Tras la audiencia, el abogado de Ibar, Benjamin Waxman, explicó a Efe que la prueba de huellas dactilares es «un tipo muy específico de prueba de microscopía» y los resultados pueden estar listos en un par de días.

«Si en la comparativa de las huellas dactilares de Ortiz coinciden éstas con las que aparecen en el lugar del crimen» sería un gran paso y posiblemente no solicitaremos que se practiquen las de ADN», dijo el letrado cuando se le preguntó por la prueba.