Una patrullera de Aduanas navega por la zona donde fue rescatado anteayer el cadáver de Vicente Costa. Foto: M.T.

Vicente Costa Tur, natural del municipio de Sant Josep y con actual domicilio en Jesús, es la persona que fue rescatada muerta de Cap Martinet después de que se descubriera su cadáver flotando junto a los acantilados que hay detrás del campo de tiro. La Guardia Civil continuaba ayer tratando de aclarar las circunstancias de su muerte. La hipótesis de que pereció accidentalmente al despeñarse por las rocas, desde una altura superior a los 20 metros, es la que barajan los investigadores como la más probable.

La autopsia confirmó que Costa Tur, de 41 años, sufrió en su caída múltiples fracturas, varias de ellas lo suficientemente graves para ocasionarle su fallecimiento antes de que su cuerpo quedara flotando en el agua.

Los familiares de la víctima identificaron al fallecido horas después de que su cadáver fuera rescatado del mar gracias a que la Guardia Civil logró contactar con sus allegados.

Incógnitas
Las circunstancias que precedieron al deceso son toda una incógnita por lo que, a falta de claros indicios criminales como podrían ser heridas ocasionada por un arma blanca o de fuego, se cree que bien pudo precipitarse al vacío por una causa accidental, como pudo ser un traspiés o un resbalón al acercarse imprudentemente a los acantilados. En el momento de su muerte no existía ninguna denuncia por desaparición o porque su vida pudiera estar en peligro.

El cadáver de Vicente Costa fue hallado anteayer tarde cuando la víctima iba completamente vestida de calle, incluso el calzado que solía utiliza habitualmente. Agentes de los Grupos especiales de Actividades Subacuáticas (Geas) de la Guardia Civil recuperaron el cuerpo de Costa Tur. Tras ello comenzaron las investigaciones que está abordando el equipo de Policía Judicial y que contó con el concurso de resto de puestos del instituto armado a fin de poder, en primera instancia, identificar lo antes posible al fallecido. Dicha persona no portaba ninguna documentación ni papel alguno entre sus ropas que sirviera para conocer al menos su nacionalidad y si ésta era residente en la isla.