La Guardia Civil inició ayer en Mallorca una operación por una estafa de unos 33 millones de euros en inversiones en oro de una empresa internacional. Al cierre de esta edición había tres detenidos, empleados de la compañía en Peguera, pero el operativo seguía abierto porque hay más implicados. Hay cientos de afectados, algunos en Mallorca y cerca de una decena en Eivissa. Hace unas semanas la Guardia Civil tuvo conocimiento de que una empresa conocida como Dividium había captado un elevado número de inversores en Alemania, España y Suiza. Los clientes aceptaban pagos de determinadas cantidades de dinero -algunos de ellos muy elevados- a cambio de altísimos intereses. Los brokers aseguraban que poseían propiedades en minas de oro, que es un valor seguro, y que la inversión sólo podía dar beneficios. Todo indica que se trata de un estafa piramidal.