Agentes de la Policía Local de Sant Antoni lograron detener a una mujer a la que se acusa de entrar a robar en una vivienda de la localidad mientras la residente estaba en el interior. La mujer, supuestamente, logró llevarse la cartera, en la que había 570 euros.

Al tratarse de una cantidad superior a los 400 euros está acusada por un presunto delito de hurto, en lugar de una falta. La detenida fue puesta ayer a disposición del juez de guardia. El Ministerio Público solicitó una pena de ocho meses de prisión. La sospechosa es la josepí S.B.N., de 36 años de edad. Este tipo de robos es habitual en casas de campo. Los ladrones vigilan y esperan al acecho el momento oportuno para entrar en las casas.

Una mujer denunció recientemente en la Guardia Civil de Santa Eulària que mientras ella y sus invitados estaban en la piscina de su casa de campo, alguien entró en los apartamentos de los invitados y se llevó todas las carteras. Esta misma mujer denunció meses atrás que se encontró dentro de su casa varias mujeres y que cuando les preguntó qué hacían allí le respondieron que estaban «buscando a María».

A un hombre que vive en una casa de campo en la zona de Sant Carles le robaron mientras estaba fregando en la cocina. Los ladrones se llevaron una pequeña cantidad de dinero y el hombre decidió no denunciar.

Otro truco habitual para realizar este tipo de robos es el que consiste en preguntar a los residentes en casas de campo si conocen alguna residencia en alquiler. Mientras una de las personas sigue al residente interrogado mientras le conduce hacia alguna casa, su compinche aprovecha para entrar en su domicilio para robar. Así ocurrió el año pasado en la zona de Can Guasch.