El Cuerpo Nacional de Policía y la Guardia Civil han conseguido en tiempo récord resolver los dos únicos homicidios que se han registrado este año y de los que se han tenido noticia. En fase de investigación se encuentra otro caso del que no está claro si la víctima fue víctima de un homicidio o si sufrió un accidente.

El año pasado tan sólo se produjo un homicidio de este tipo, el del suizo que vivía en Cala Llonga Reiner Peter Tino Briner, de 58 años. La Guardia Civil detuvo como sospechoso al alemán de 38 años Daniel Alfred C., amigo de la pareja. Negó la acusación y el juicio aún no se ha celebrado.

En 2007 fueron tres homicidios, uno de ellos en Formentera, en la zona de es Pujols. Los otros dos fueron en Cala Tarida y en es Canar. En los tres casos se produjeron detenciones y en el caso de es Pujols el autor ya fue condenado. En los otros dos casos aún se está pendiente de la celebración del juicio.

En junio pasado se produjo un extraño crimen en una habitación de hotel de Sant Antoni. Murió el ítalo-colombiano Alejandro A., pero durante varios días, por error, se pensó que la víctima era el quien resultó ser el presunto homicida, el estonio Alvar Paas. Se entregó en Comisaría y ante la Guardia Civil y ante el juez reconoció que mató a Alejandro A. clavándole un cuchillo en el cuello tras discutir por motivos intrascendentes.

El segundo homicidio de este año fue, en septiembre pasado, el del joven francés Jonathan Blanch, un okupa de la Comandancia. En apenas dos días un rastro de sangre derivó en dos detenciones. Todo apunta a que el principal sospechoso es el también francés A.D.Y.