«He sido cinco años militar y conozco la disciplina. No sois hombres, sois unos mierdas. Me vais a joder la vida». Por éstas y otras frases similares, entre otros motivos, tuvo que sentarse ayer en el banquillo un joven titiritero al que la Guardia Civil y la Policía Local de Santa Eulària detuvo en Sant Carles tras ser sorprendido cuando supuestamente conducía borracho y haciendo maniobras peligrosas en uno de los aparcamiento de Las Dalias.

El acusado negó estos hechos y afirmó que era su compañera la que iba al volante de una furgoneta en la que, además, pernoctan. Según su declaración, los agentes se presentaron cuando él se había quedado en el vehículo y su pareja había ido a recoger una alpargatas que había dejado olvidadas.

Penas en juego

El suceso tuvo lugar el 25 de junio de 2002 y ayer fue visto el caso en el Juzgado de lo Penal número 2 de Eivissa. El fiscal pidió para el presunto infractor multas y retirada del derecho a conducir, así como 33 días de trabajo para la comunidad al considerarlo responsable de un delito contra la seguridad del tráfico y de una falta de menosprecio a los agentes de la autoridad. En total, si es condenado, el 'artista urbano' pude tener que pagar 3.000 euros y verse privado del carné de conducir durante 21 meses.

Los agentes que declararon ayer en el juicio ratificaron que el sospechoso dio en la etilometrías 0,77 mg/l y que era él el que con total seguridad iba frente al volante.

La intervención del Instituto Armado tuvo lugar después de que, al parecer, un antiguo empleado de la seguridad del local avisara de que había un individuo conduciendo peligrosamente y haciendo gestos obscenos con una botella de ron en la mano en un espacio en el que coincidía la presencia de niños.