J.M.A.

El juez de guardia ordenó ayer el ingreso en prisión con carácter provisional de una prostituta de nacionalidad nigeriana de 27 años que está acusada por un delito de robo con intimidación, informaron ayer fuentes judiciales.

La mujer, que se encuentra en el país en situación irregular, fue arrestada a raíz de una denuncia presentada por un turista de nacionalidad alemana y 20 años de edad que explicó que cuando se encontraba por la zona de Platja d'en Bossa, alrededor de las cuatro de la madrugada, adonde había acudido para «conocer la noche ibicenca», según declaró, tres chicas jóvenes se acercaron para ofrecerle favores sexuales a cambio de dinero, a lo que él no accedió, pero las jóvenes insistieron y formaron un revuelo a su alrededor.

La detención

De pronto el turista alemán comprobó que le habían robado el teléfono móvil y 350 euros. El joven pidió a las chicas que le devolvieran el dinero, pero tan sólo logró recuperar el teléfono móvil.

Insistió a una de las chicas, la que él cree que le quitó el dinero, para que se lo reintegrara, pero ella rompió una botella en el suelo y amenazó al joven alemán poniéndole el vidrio roto en el cuello. La sospechosa aprovechó el temor del joven para huir.

El alemán llamó a la policía y facilitó a la descripción de la sospechosa. Los agentes dieron pronto con el paradero de la nigeriana y la detuvieron. El turista la reconoció, sin ningún tipo de duda, como la mujer que le ofreció servicios sexuales y le robó el dinero y el teléfono móvil, informaron las fuentes judiciales.

Ante el juez de guardia, la mujer dijo que ella no fue la autora del robo sino una de sus compañeras.