El Jefe del Centro de Control de Incendios de la Conselleria de Medi Ambient, Miguel Sintes, calificó el incendio de Benirràs como «uno de los más difíciles», tanto por la cantidad de personas que había el primer día en la playa, como por las numerosas casas ubicadas en la zona. «De hecho, no había ocurrido nunca en la historia de Balears, que yo recuerde, que se hayan quemado 20 coches. Han ocurrido cosas muy pintorescas que hacen que esta situación sea muy, muy especial», destacó.

Este centro de coordinación se encarga desde Mallorca de la movilización de todos los medios terrestres y aéreos que participan en la extinción del fuego, mediante decisiones que siempre son cotejadas con el Servei d'Emergències de les Illes Balears (Seib 112).

Desde un avión de reconocimiento, «que hace de torre de control», el centro recibe imágenes a los tres segundos de ser captadas desde el aire y comienza la valoración y la toma de decisiones sobre el incendio en cada momento. Muchas de ellas se activan por puro protocolo, sin embargo, otras lo superan y dependen de las valoraciones de los técnicos en función de la información de la que disponen.

«En el caso de Eivissa, como vimos que la cosa se complicaba, empezamos a pedir más unidades y más refuerzos», explicó Sintes, aunque destacó que hubo una decisión mucho más complicada que tomar.

«El otro día [el lunes] cuando tuvimos un incendio aquí en Mallorca, tuvimos que decidir si teníamos que quitar medios a Eivissa o no, porque el incendio de Eivissa quemó en torno a las 350 hectáreas pero el incendio de Mallorca quemó 140, que es otro gran incendio. Y tuvimos que apretarnos el cinturón y trabajar con los medios de Mallorca. Fue una decisión difícil pero hubo que hacerlo así y, al final, el de Mallorca conseguimos pararlo en tres horas y media», detalló.

Según el jefe del centro, aunque el incendio de Benirràs ha pasado de estar estabilizado, «porque ya no se mueve aunque aún quedan zonas inaccesibles con humo», a controlado «porque ya no hay humo», no supone que llegó el momento de la retirada de los medios de vigilancia aérea de Mallorca. «A nosotros, la historia nos dice que este tipo de incendios los tenemos que dejar entorno a una semana para darlo por extinguido. No podemos darlo por extinguido y que haya un pequeño humo, por muy pequeño que sea», agregó.

En este sentido, explicó que «el domingo se tomará la última decisión». «Si lo damos por extinguido, los miembros del equipo de extinción de Eivissa seguirán acudiendo y vigilando, pero desde Mallorca ya no mandaremos cada día un avión con una brigada y un técnico para seguir haciendo valoraciones», concluyó.