La lancha navegaba a 35 nudos, unos 65 kilómetros por hora, cuando se estrelló contra el islote | JAVI ASENSIO

Dos vigilantes de la Reserva Marina de Formentera, Àlex Martín y Jan Chastaing, sufrieron el jueves por la noche un grave accidente cuando, en el desempeño de su tarea de control de pesca, su embarcación colisionó con el islote de sa Torreta, en las inmediaciones del faro den Pou y de s'Espalmador.

Chastaing se encuentra en estado grave en la Policlínica de Nuestra Señora del Rosario, desde donde informaron ayer que sufre fracturas de elementos posteriores en las vértebras C6 y C7, así como una rotura de mentón abierta y un traumatismo craneoencefálico con una herida inciso contusa frontal. Martín, piloto de la lancha, sufrió un fuerte golpe en las costillas al golpearse contra los controles de la embarcación.

Los hechos sucedieron alrededor de las nueve y media de la noche cuando los vigilantes detectaron en el radar que una embarcación salía de la Reserva Integral de Pesca, que engloba a s'Espardell, y que aparentemente se dirigía hacia es Freus y las inmediaciones de es Codolar, junto al aeropuerto de Eivissa. Durante la persecución la lancha viajaba a unos 35 nudos, unos 65 kilómetros por hora y todo indica que, debido a la velocidad, el retorno de la señal del radar era inferior a la propia velocidad de la embarcación que en un espacio reducido hizo que la información no fuera la adecuada y acabaron colisionando con el extremo norte del islote, situado en la zona de sa Torreta.

«No perdí el conocimiento»

El piloto atendió de inmediato a su compañero y, en lugar de llamar a Salvamento Marítimo, el procedimiento habitual, decidió avisar a una náutica de Formentera para el rescate, ya que la embarcación de Salvamento habría tenido muchos problemas para acercarse hasta el islote y el rescate se hubiera retrasado considerablemente, mientras que una zódiac permitía una evacuación rápida.

Ambos vigilantes fueron trasladados a la Savina y de allí en ambulancia al Hospital de Formentera, donde Martín quedó ingresado, mientras que el piloto fue trasladado de inmediato a Eivissa.

Martín, que pilotaba la embarcación, explicó que tocaron una roca y subieron al islote: «El golpe fue muy fuerte y lo recibí en el pecho; afortunadamente, no perdí el conocimiento y pude atender a mi compañero».

Martín recordó que el impacto lo recibió frontalmente y que «la caja torácica paró el golpe, de manera que el corazón no resultó afectado». No obstante, ayer le sometieron a controles y ecografías para descartar cualquier hemorragia interna u otro tipo de complicaciones.

La lucha contra las infracciones en el área protegida del mar pitiuso

Los vigilantes de la Reserva Marina de Formentera son pieza fundamental para controlar la pesca furtiva y así se ha demostrado en los últimos años en los que, con personal escaso, han detenido y multado tanto a submarinistas como a embarcaciones de recreo o profesionales que vulneraban las normativas.

Las infracciones detectadas y sancionadas han sido numerosas y se han visto capturas de pez espada, meros, elementos para la pesca submarina con botellas y todo tipo de contravenciones a la normativa que, en algunos casos, han supuesto multas de elevada cuantía.