La magistrada Martina Rodríguez, responsable accidental en su día del Juzgado de lo Penal número 1 de Eivissa, ha condenado a un año de cárcel substituible por la expulsión a un joven cubano de 31 años que fue detenido por la policía instantes después de un robo con violencia en el puerto de Eivissa ocurrido el 7 de diciembre. El acusado se abalanzó sobre su víctima, un hombre de 54 años, e intentó arrebatarle un maletín que portaba y que contenía mil euros.

La expulsión no podar hacerse efectiva aún porque la sentencia ha sido recurrida ante la Audiencia. Se da la circunstancia de que el sospechoso, aquejado de dolencias mentales, ha tenido que ser trasladado a la prisión de Palma después de que hubiera sufrido varias crisis graves que hicieron temer por su integridad.