El magistrado Juan Pedro Illanes, que esta semana ha presidido el tribunal que se ha desplazado a Eivissa para juzgar por blanqueo de capitales y tráfico de drogas al argentino Diego Emiliano Corzo, supuesto enlace de la mafia calabresa en la Isla, decidió suspender la vista y emplazar de nuevo a los acusados para concluir el juicio el próximo viernes en Palma.

La decisión de la Audiencia Provincial de aplazar la vista oral una semana se debió a la ausencia de dos testigos, un policía que detuvo a Corzo y un hombre que vendió un vehículo a éste. Se da la circunstancia de que ayer era el último día señalado para finalizar un juicio que se ha estado celebrando en la Isla durante toda la semana.

Está previsto que se concluya este trámite en Mallorca con la presencia de estos dos testigos y con el informe final del fiscal y las defensas de los cinco encartados. Corzo, que se enfrenta a 10 años de cárcel, así como su exmujer y su exsuegra y dos asesores de Eivissa, todos acusados de blanqueo de capitales.