La juez del Juzgado de lnstrucción número 1 de Eivissa, en funciones de guardia, envió ayer por la tarde a prisión provisional sin posibilidad de fianza al holandés A.K., de 39 años, imputado por un delito de conducción temeraria bajos los efectos del alcohol con resultado de muerte. Sobre las ocho y media de la tarde del domingo, A.K. conducía por la carretera de Sant Antoni un Citröen C4 de alquiler en el que viajaban cuatro personas más. Arrolló por detrás al viejo Ford Fiesta que conducía Bartomeu Ribas Prats, natural de Sant Antoni y de 71 años de edad, que murió por la noche en el hospital de Can Misses a consecuencia de las graves heridas que sufrió.

El accidente se produjo sobre las ocho y media de la tarde en el punto kilométrico 10,50 de la autovía de Sant Antoni, en sentido hacia esta localidad. Según testigos, Bartomeu Ribas circulaba por el carril de la derecha y se disponía a tomar el cruce hacía su casa, situada muy cerca de la carretera.

Casi parado

Su Ford Fiesta estaba casi parado cuando el Citröen C4 lo embistió por detrás. Algunos testigos declararon que el austriaco iba a gran velocidad y que estaba adelantando por la derecha. Los cinco ocupantes del coche de alquiler resultaron ilesos. La Guardia Civil de Tráfico sometió al holandés a la prueba de la alcoholemia y dio 0,69 miligramos de alcohol por litro de aire espirado.

Bartomeu Ribas es el tercer fallecido de este año en las carreteras de Eivissa, el cuarto de las Pititüses, ya que en Formentera murió la joven italiana Francesca Angela Lunardi, de 24 años. En enero fue atropellado un hombre en la carretera de Sant Josep y al día siguiente se entregó el conductor. El 11 de mayo murió, también por atropello, un joven. Un autobús de turistas le pasó por encima y murió en el acto.