El alcalde de Sant Josep presidió ayer la Junta Local de Seguridad.

R.S.

La Junta Local de Seguridad de Sant Josep se reunió ayer bajo la presidencia del alcalde, Josep Marí Ribas, y de la directora insular, Sofía Herranz, y a ella asistieron el capitán de la Guardia Civil, Juan Muñoz Tovar; el teniente Juan José Belmonte; el Jefe de la Policía Local, Jaume Ramón; la segunda teniente de alcalde, Paquita Ribas; y la cuarta teniente de alcalde, María Àngeles Mostazo.

Las tres decisiones más importantes que se adoptaron fueron la coordinación entre las fuerzas de seguridad locales y estatales para combatir a los taxis 'ilegales', la venta ambulante y los pequeños hurtos en las playas, así como, reforzar el control para combatir las fiestas ilegales en domicilios particulares. Además, se decidió aumentar la presencia policial en el aeropuerto.

«Estamos convencidos de que una mayor presencia policial, mañana y tarde, en el aeropuerto servirá como medida disuasoria importante. Actuamos en defensa de la legalidad del sector del taxi y contamos con la colaboración de la Guardia Civil», señaló el alcalde de Sant Josep.

Marí Ribas añadió que se ha detectado un repunte de las fiestas 'ilegales' en casas y dijo que el Ayuntamiento será inflexible.

Además, se ha aprobado una mayor presencia policial local en playas y calas para combatir la venta ambulante y los pequeños hurtos. "Los medios policiales se verán apoyados por la presencia de doce informadores de playas que como trabajadores el Ayuntamiento servirán como elementos disuasorios», dijo Marí.