El sábado se colocó el último mallazo de cadenas que rodea el barco bajo la quilla. | Guillermo Romaní

El proceso de reflotamiento del Royal Enterprise no progresa con la velocidad que los equipos de trabajo, los propietarios y los formenterenses quisieran. En las maniobras previas al reflotamiento efectuadas entre sábado y domingo se comprobó que el casco de la embarcación tiene importantes fisuras por las que está embarcando agua hasta el punto que según José Ave, propietario de la empresa Servicios Marinos Ave, «puede haber hasta cien toneladas de agua dentro del barco».

Previsto para hoy
Ayer se intentó sellar las grietas, pero el oleaje impidió que los trabajos se pudieran desarrollar con normalidad y en consecuencia será hoy, si el mar da un respiro, cuando se intentará el alelado de las grietas. Para ello, explicó Ave, deberá extraerse gran parte del agua que hay en el interior del barco.
Hoy, si el estado de la mar lo hace posible, se comenzará con el achique de agua e inmediatamente que sea seguro y operativo, los buzos comenzarán a sellar las grietas. Si la sustancia selladora fragua adecuadamente, el paso siguiente será continuar con el achique del agua para posteriormente estabilizar la embarcación antes de intentar darle ‘un tirón por popa', como dicen los expertos, para desencallarla de la costa rocosa. El Royal Enterprise, de 32 metros, lleva 40 días varado en s'Estany d'es Peix.