Un envío de hachís realizado desde la Península a Eivissa le ha costado un apena de un año y un día de cárcel a un joven residente en Eivissa. Éste, además, tendrá que hacer frente a una multa de 2.300 euros por ser autor de un delito contra la salud pública.

Ésta es la condena que aceptó ayer ante la juez Martina Rodríguez, titular del Juzgado de lo Penal número 2 de Eivissa, un joven que fue detenido en abril de 2006 después de que dicha persona se presentara en las oficinas de la empresa Seur para hacerse cargo de un paquete que contenía esta cantidad de droga.

Peso

Según la información recogida por este periódico, el hachís estaba repartido en un total de 51 bellotas que, tras ser pesadas, arrojaron un peso total de 494 gramos.

La detención de dicha persona tuvo lugar después de que los escáneres, al parecer los propios de la citada empresa de mensajería, detectaran la presencia de lo que se supuso, acertadamente, que era droga. Tras darse aviso a las fuerzas de seguridad, se instaló un dispositivo de espera que fructificó el 24 de abril cuando el acusado se presentó a recoger el paquete.

Venta

La investigación judicial que se realizó posteriormente determinó que el contenido para el envío no sólo iba a ser destinado para autoconsumo sino también a la venta entre terceras personas.

Según los indicios, el hachís había sido introducido en España por una persona que había realizado las tareas de ‘mula' y que probablemente había alojado dentro de su cuerpo el hachís que precisamente luego fue requisado en Eivissa.