Los bomberos de Eivissa tuvieron ayer una tarde ajetreada con dos intervenciones en Vila. La primera tuvo lugar a las 16,55 horas cuando en la estación de Sant Rafel se recibió una llamada alertando de que un hombre estaba en un balcón del número 5 de la calle Guerrería gritando muy nervioso.

Los agentes acudieron al lugar y rapidamente pudieron comprobar que el hombre se había quedado atrapado y pedía ayuda de forma desesperada para poder entrar a su vivienda.
Para conseguirlo Tuvieron que emplear sus ecaleras exteriores y de ganchos y escalar la fachada. Finalmente los agentes consiguieron poder llegar hasta el balcón y abrir la puerta de la vivienda que se había quedado enganchada.

Pequeño incendio
Posteriormente, prácticamente una hora después, a las 18,25 horas, volvieron a recibir una llamada, en este caso por un fuego originado en el número 4 del edificio Illetes de la calle Travesía.
Cuando los bomberos llegaron hasta la zona comprobaron que el fuego se había generado en el segundo piso del bloque de edificios debido a un brasero eléctrico que, debajo de una mesa camillo, había hecho prender un hule, la misma mesa y un par de sillas.

Afortunadamente todo quedó controlado a los pocos minutos y los vecinos del edificio pudieron salir por su propio pie sin tener que lamentar daños personales.