H.A., de nacionalidad marroquí, se enfrenta a una pena de dos años de cárcel por la presunta comisión de un delito de lesiones con instrumento peligroso, en concreto un destornillador. Los hechos que se juzgaron ayer ocurrieron en una terraza de un local de la avenida de España de Vila. Según la acusación, H.A. atacó a otro hombre de su misma nacionalidad con un destornillador. Le asestó, según esta versión, un puñetazo con el destornillador en la mano, lo que causó una herida al otro hombre, que precisó cinco puntos de sutura.
El acusado dice que fue el otro hombre quien le atacó primero y que le golpeó con las llaves. Por su parte, dos motoristas del Cuerpo Nacional de Policía que casualmente pasaban por el lugar corroboraron ayer en el juicio la versión de la víctima.
Deuda
Al parecer, la disputa entre los dos hombres tiene su origen en una deuda económica.
La juez del Juzgado de lo Penal número 2 de Eivissa, Martina Rodríguez, dejó el caso visto para sentencia.