La zona afectada por las llamas se encontraba muy cerca de las bombonas de butano (al fondo).

Los bomberos de Eivissa tuvieron que emplearse a fondo durante la madrugada del lunes al martes para conseguir sofocar los tres incendios que se registraron en la zona de Portinatx.

La primera llamada se recibió en el parque de Sant Rafel a las 04,20 horas. En ella se alertaba de que un almacén del restaurante Minigolf Can Lluqui estaba siendo devorado por las llamas. Rápidamente, hasta el lugar se trasladaron dos camiones con seis agentes, que una vez llegaron hasta esta nave, situada en el kilómetro 26,800 de esta carretera, comprobaron que el fuego estaba afectando a todo el material que había en el interior de la edificación.

Aunque las causas del incendio se desconocen, presumiblemente el fuego se pudo ver agravado al explotar una pequeña bombona de butano que había en los alrededores, aunque afortunadamente no hubo que lamentar daños mayores al encontrarse otras 14 botellas vacías.

Finalmente, los bomberos consiguieron acabar con el fuego a las 06,45 horas. Sin embargo, los agentes no pudieron terminar con tranquilidad esta intervención ya que sobre las 05,30 horas el parque de bomberos recibió otra llamada alertando de otro fuego en la zona.