El Juzgado de lo Social de Eivissa tuvo que suspender los juicios que tenía previsto celebrar ayer por la mañana porque la magistrada Rosa María Doménech se puso enferma, confirmaron ayer desde el TSJ. Al parecer, fueron cerca de una decena las vistas orales que hubo que suspender ante la ausencia de juez, lo cual fue motivo de enfado entre los numerosos afectados por este hecho.
Desde el TSJ explicaron también que las nuevas leyes diseñadas desde el Ministerio de Justicia han restado importancia de una forma considerable a la figura del juez sustituto, de manera que, cuando se produce un caso como el de ayer en el Juzgado de lo Social de Eivissa, es necesario recurrir a «un turno forzoso» elaborado con los jueces de cada partido judicial para que sea uno de estos -y no uno sustituto, como ocurría anteriormente- quien se encargue de hacer el trabajo del compañero que se encuentre de baja laboral. Al parecer, en el partido judicial de Eivissa no se ha creado ese ‘un turno forzoso’, lo que hizo que ayer ningún juez se pudiera hacer cargo del Juzgado de lo Social de la Isla.
El TSJ informó de que ayer, no obstante, el juez decano de Eivissa, Juan Carlos Torres, designó un juez sustituto para que se hiciera cargo del Juzgado de lo Social de Eivissa. Sin embargo, la designación fue desautorizada por el TSJ, desde donde añadieron que la Sala de Gobierno tiene previsto estudiar el problema para buscar una solución para que no vuelva a producirse una situación como la de ayer.
La secretaria del Juzgado de lo Social de Eivissa se dirigió ayer por la mañama la secretaria de Gobierno del TSJ con el fin de exponerle el problema que se originó.
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