Arriba, estado en que quedó el hueco de la escalera; abajo, imagen general del edificio afectado. | Toni Escobar

La alarma saltó sobre las seis media de la madrugada, cuando comenzó a arder un sofá situado en la planta baja del número 14 de la calle Valencia de Sant Antoni. Desde el Hotel Brisa, situado justo enfrente del edificio en el que se produjo el incendio, explicaron ayer que el recepcionista de este establecimiento fue el primero en percatarse de que había llamas en el interior del inmueble.

El recepcionista tomó un extintor del hotel y prácticamente sofocó las llamas él solo, de manera que cuando llegaron los bomberos del Consell d’Eivissa ya no quedaba fuego, si bien la humareda era considerable y generó bastante alarma entre los vecinos y turistas de la zona.

El humo afectó al rellano de la escalera del edificio, de forma que los bomberos, además de asegurarse de que las llamas no se reavivaran, tuvieron que ventilar todo el inmueble.