Realizaron las inspecciones en Platja d’en Bossa y en Sant Antoni, en la imagen. | Marco Torres

Técnicos de Puertos y Aeropuertos de la Consellería de Turismo se coordinaron ayer con el Servicio Marítimo de la Guardia Civil para inspeccionar embarcaciones fondeadas en Platja d’en Bossa y en Sant Antoni ante la posibilidad de actividad ilegal en el ámbito de las excursiones marítimas, un concepto que incluye las denominadas party boats.

Estas actuaciones se llevan a cabo tras conocerse de la realización de la actividad de transporte marítimo, presuntamente de manera irregular, por una serie de embarcaciones, informaron ayer la Direcció General de Ports i Aeroports de la Conselleria de Turisme.

Comprobación

Ayer por la mañana, esta Dirección General y el Servicio Marítimo de la Guardia Civil llevó a cabo seis inspecciones en embarcaciones en la isla para comprobar que estos barcos cumplen con los requisitos para realizar excursiones marítimas en el litoral balear. Ports i Aeroports inició unas diligencias informativas previas, que suponen un paso preliminar en el proceso de investigación de las supuestas irregularidades que puedan detectarse y según el resultado, de acuerdo con la ley, se procederá la incoación de los preceptivos expedientes sancionadores.

Al parecer, la actividad irregular se desarrolla en las zonas de Platja d’en Bossa y de Sant Antoni con barcos fondeados y la utilización de embarcaciones menores para transportar la gente desde la costa hasta los barcos.

La falta de presentación de la preceptiva comunicación previa ante Ports i Aeroports del Govern, al inicio de la actividad, ya se considera una infracción, que será leve, es decir, con multa de hasta 5.000 euros, si soluciona este trámite, y grave, si no lo enmienda o si es reincidente (con multa de hasta 100.000 euros).