Hasta el lugar del incendio se desplazaron dos vehículos de los Bomberos con seis efectivos que sofocaron el fuego en las oficinas.

Eran las 4,19 de la madrugada cuando los bomberos eran alertados de que la alarma de incendios de la base de Ibizatours había saltado.

Rápidamente salieron hacia la nave localizada en Can Negre dos vehículos de los Bomberos de Eivissa con tres bomberos, dos cabos y el sargento del cuerpo.

La proximidad de la nave donde se localizaba el fuego y el parque de Bomberos fue «determinante para evitar daños de mayor envergadura», señaló el jefe de Operaciones de Ibizatours, Miquel Costa.

Cuando los bomberos llegaron el fuego estaba acotado en la segunda planta de la zona de oficinas.

Según informaron fuentes de los bomberos, al acceder a la segunda planta se encontraron con una gran cantidad de humo por el tipo de material.

En un momento dado y debido al calor acumulado, un falso techo de escayola se vino abajo y esto avivó las llamas.

No obstante, los bomberos evitaron que las llamas pasasen a otra ala de la nave y acabaron por sofocarlas en el mismo habitáculo donde se había originado.

Los trabajos de extinción y ventilación de la nave se prolongaron durante tres horas.

Las primeras investigaciones apuntan a un cortocircuito o chispa emanada de algún equipo informático como causa del fuego.

Los responsables de la empresa destacaron que la alarma y la rápida intervención de los bomberos evitaron que el incendio fuese a más.

Los daños se centraron en la zona de oficinas afectando a varios ordenadores.

Eso sí, una quincena de autobuses estacionados en una zona de la base de vehículos deberán ser sometidos a un lavado ya que quedaron cubiertos por una fina capa de hollín causada por el incendio.

«Habrá que limpiar los autobuses por fuera y por dentro del hollín pero afortunadamente todo ha quedado en un sobresalto», señaló Costa.