La rápida actuación de un adolescente y de unos agentes de la Policía Local de Santa Eulària, con la asistencia posterior del 061, permitió salvar la vida de un niño de 5 años que a primera hora de ayer entró en parada cardiorrespiratoria en un hotel del municipio.

Los hechos se desencadenaron en torno a las 7.20 horas en el complejo turístico Cala Blanca, en es Figueral.
Según informaron fuentes municipales, la Policía Local recibió el aviso de que un niño, que se encontraba de vacaciones con su familia en el complejo, tenía una insuficiencia respiratoria grave.
La patrulla se dirigió rápidamente hasta la zona. Al llegar, los policías se encontraron al niño en el suelo de la recepción, inconsciente y sin respiración, y recibiendo un masaje cardíaco por parte de un adolescente alojado también en el mismo hotel.

Intervención vital

Los agentes tomaron el relevo de los trabajos de reanimación, con el desfibrilador semiautomático y la máscara de oxígeno que tienen en el vehículo patrulla.
Las mismas fuentes apuntaron que tras un cuarto de hora de maniobras llegó un médico del Punto de Atención Continuada (PAC) de Santa Eulària, que valoró el estado del paciente y comenzó a buscarle una vía mientras los policías continuaron actuando durante otros diez minutos hasta que llegó la ambulancia del 061.
Pocos minutos después, se detectó el pulso al niño, que recuperó su respiración autónoma, señalaron las mismas fuentes.

Una vez el menor fue estabilizado, el servicio de emergencias procedió a evacuar de urgencia al menor al hospital de Can Misses, donde ingresó con pronóstico grave por los daños causados por la parada cardiorrespiratoria.