La Policía Local de Sant Antoni ha precintado los equipos musicales de un local situado en Caló des Moro, cuya licencia de actividad musical había sido revocada en cumplimiento de una resolución que la Junta de Gobierno municipal adoptó en abril.

Según ha informado el Ayuntamiento, el local había infringido la Ley 1/2007 contra la contaminación acústica de Baleares al incumplir los valores sonoros permitidos para este establecimiento, que superaba en 16,6 decibelios los autorizados por norma.

El hecho denunciado, tipificado en esta Ley como infracción grave, fue sancionado con una multa de 12.001 euros y la retirada durante dos años de la autorización para actividad musical.

Tras notificar la resolución, el interesado presentó un recurso de reposición. Durante su resolución, se recibieron nuevas quejas vecinales y finalmente los servicios jurídicos municipales han resuelto el recurso y han determinado que las sanciones previstas se deben mantener, por lo que se procedió a precintar los equipos del local.