EFE-MONTECARLO Pedro de la Rosa (Arrows A20) y Marc Gené (Minardi M01 Ford) no cometieron fallos en la primera jornada de entrenamientos libres del Gran Premio de Mónaco de Fórmula Uno, con lo que han podido rodar el máximo posible para aprenderse el intrincado circuito urbano de Montecarlo y al final han terminado en los puestos decimoctavo y vigésimo primero, respectivamente.

La jornada de ayer era extremadamente importante para los pilotos españoles por lo complicado del circuito, pero ambos la superaron de forma satisfactoria, aunque no se puede decir lo mismo de sus coches.

Pedro de la Rosa, que dedicó la primera parte de la jornada a rodar sin hacer ningún reglaje, en la segunda trató de remediar el problema que suponía que el coche se marchara de morro, sobre todo cuando la tracción es muy buena.

A pesar de los cambios introducidos el coche no mejoró su comportamiento y Pedro junto a los ingenieros y mecánicos tienen poco menos de 48 horas por delante para tratar de resolver el problema.

Marc Gené, sin embargo, se quejaba de la falta de tracción de su Minardi. Una vez aprendido lo suficiente el circuito ha comenzado a introducir cambios en el monoplaza y lo ha mejorado bastante.