El día uno para la selección fue de relax. El equipo sólo se
llevó el sobresalto del «madrugón» en Gotemburgo para tomar el
avión que le desplazaría a Eindhoven. Los jugadores de la selección
desayunaron con la agradable sensación de saber que la prensa
española había reflejado con buenas impresiones el juego ante
Suecia en el partido amistoso. A pesar del empate, el equipo de
Camacho ofreció buenos destellos y dejó ver la calidad que muchos
jugadores atesoran.
Suecia es un rival de parecidas características a Noruega y el
examen ha servido para que se tome nota de lo que espera el próximo
día 13 en Rotterdam. Paco Jémez, defensa del Zaragoza, expresó esa
idea. «Suecia y Noruega son dos selecciones muy similares y por eso
se ha disputado el partido ante los suecos, para que nos vayamos
mentalizando de lo que nos vamos a encontrar contra los
noruegos».
El pensamiento era el mismo en el resto de los jugadores. Todos
están prestos y dispuestos para comenzar con buen pie, es decir con
un triunfo ante los noruegos. «Es la importancia del primer
partido. Ganar el primer encuentro en una competición corta como la
Eurocopa es fundamental. Es recibir una buena dosis de moral para
lograr los objetivos marcados», señaló Guardiola.
En el aeropuerto de Tegelen, el equipo nacional esperó el
embarque con ambiente distendido. Los jugadores formaron
«corrillos» con la prensa y dialogaron sobre el partido ante Suecia
informalmente, sin grabadoras ni cuadernos de por medio.
El domingo es día de descanso para los jugadores y hasta hoy,
lunes, no se producirá el primer encuentro oficial con la prensa en
el nuevo cuartel general de la selección. Un Chateau con todo tipo
de comodidades para que la espera a la competición oficial sea la
más propicia.
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