El presidente del PDV se enteró de la dimisión de Javier Ferrer como técnico del equipo el pasado lunes.

CARLOS G. CASUSO Auténtica sorpresa ha causado en el mundo del baloncesto la noticia de la repentina dimisión de Javier Ferrer como técnico del Puig d'en Valls, ya que el equipo le había cogido el aire a la categoría, después de un comienzo dubitativo en la competición de la Primera División femenina. El conjunto ibicenco consiguió hacerse fuerte en el Polideportivo Municipal de Santa Eulària, venciendo a equipos de superior nivel al suyo como el Siglo XXI, SESE Airtel o Cornellá.

El primer sorprendido por la decisión del abandono del club por parte de Javier Ferrer ha sido el presidente del PDV, Antonio Marí. El máximo mandatario del equipo ibicenco comentó que «Javier Ferrer se reunió el pasado lunes conmigo para hacerme llegar su decisión, aunque, finalmente, esperaba que diera marcha atrás a su postura.». Además, Antonio Marí habló sobre los motivos que le había dado Javier Ferrer para su repentina marcha del PDV: «El técnico me dijo que estaba muy agotado porque tenía que compaginar sus negocios particulares con el baloncesto, y no se encontraba con moral suficiente para dedicarse en su totalidad al club, debido también a los continuos viajes que tenía que realizar con el equipo en sus desplazamientos».

El presidente del PDV también valoró como positiva la llegada como nuevo técnico del equipo, Vicenç Sanahuja, ya que «es un gran entrenador, con una amplia experiencia , ya que ha entrenado a otros conjuntos de categoría superior a la nuestra, lo que puede beneficiar bastante a nuestro equipo». Además, Antonio Marí no piensa que el PDV note la ausencia de Javier Ferrer, porque «Vicenç Sanahuja ha llevado la coordinación de las escuelas y equipos inferiores del Puig d'en Valls por lo que conoce ya nuestra forma de trabajar, y, además, conoce a los conjuntos de Barcelona, ya que ha estado entrenando en la zona de Cataluña, lo que nos puede venir bien a la hora de enfrentarnos a estos equipos».