ÀREA 11-Barcelona
Se acabó el sufrimiento para el Puig d'En Valls que en su victoria de ayer ante el Grup Barna consiguió la salvación matemática en la categoría. El equipo ibicenco se impuso, no sin problemas, al Grup Barna por 70 a 75 a domicilio.
Se vivió un partido trepidante, muy abierto hasta los últimos segundos en el que pudo haber pasado cualquier cosa.
El primer cuarto fue muy igualado con alternativas para los dos equipos en el marcador. El cuarto se caracterizó por el buen acierto de los dos conjuntos y acabó con un 22-20 que reflejaba dicha igualdad, y apuntaba lo que iba a ser el resto del partido. El segundo cuarto continuó con la misma tónica, pero hacia la mitad el equipo local abrió una brecha de 5 puntos a raíz de la precipitación del equipo ibicenco. Ventaja que perdería rápidamente ya que el cinco balear con buenas anticipaciones en defensa, culminadas al contraataque, reducía la diferencia y se ponía por delante llegando incluso a contar con una ventaja de 5 puntos tras un parcial de 12-2. De todas maneras el partido quedaba abierto para la segunda parte debido a un triple que conseguían los locales sobre la bocina, 36-38.
En la reanudación el equipo visitante seguía siendo superior. El partido entró en una fase de muchos errores pero el Grup Barna, asegurando el rebote defensivo, presionando y saliendo con velocidad ponía la igualdad en el luminoso con un 50-50 a falta de dos minutos para el final del cuarto. Igualdad que se mantendría de cara al último cuarto al que se llegaba con un emocionante 52-52 en el marcador. La tensión y el nerviosismo creció y con ello los errores por parte de ambos conjuntos. Con 64-64 se entraba en los últimos dos minutos y un tiro de Barranco, a falta de un minuto ponía por delante al PDV. Las faltas locales propiciaron la ventaja final. Tras el encuentro el Puig d'en Valls respira tranquilo en lo que queda de la fase regular.
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