0 REAL MALLORCA: Roa (H), Olaizola (H), Niño (-), Nadal (-), Miquel Soler (-), Campano (H), Marcos (-), Paunovic (-), Díaz (-), Eto'o (-) y Luque (-).
Cambios: Fatih (-) por Nadal, (min.25). Carlos (-) por Díaz, (min.55) y Novo (-) por Campano, (min.75).
4 SCHALKE: Reck (HH), Hajto (HH), Matellán (HH), Waldoch (HH), Van Kerckhoven (H), Olaf Thon (HH), Van Kerckhoven (HH), Asamoah (HHH), Vermant (HH), Wilmonts (HHH)y Sand (HH).
Cambios: Büskens (H) por Wilmots, (min.73), Kmetsch (H) por Van Hoogdalem, (min.78) y Nemec (H) por Thon, (min.79).
Àrbitro: Jan W. Wegereff (Holanda). Expulsó a Eto'o en el minuto 26. Enseñó tarjeta amarilla a Nadal, Marcos, Asamoah y Sand.
Goles: 0-1, minuto 14, Van Hoogdalem
0-2, minuto 21, Wilmots.
0-3, minuto 77, Asamoah.
0-4, minuto 83, Sand.
Incidencias: Estadio Son Moix. Cerca de 18.000 espectadores estuvieron en las gradas del campo. El césped se econtraba en buenas condiciones. El propietario Antonio Asensio Mosbah estuvo presenciando el partido en directo. A medida que caían los goles el público se fue indignando y sacó sus pañuelos al viento para expresar su disconformidad con esta situación. La grada pidió la destitución de Bernd Krauss. Al final fueron muchos los seguidores que abandonaron el recinto deportivo mucho antes de que se llegara al minuto noventa de partido y los que quedaron mostraron su total contrariedad con lo que sucedió.

Miquel Alzamora
Ver al Mallorca jugar en la primera parte, y también en la segunda, era ver a un conjunto que deambulaba sobre el césped como alma en pena. A excepción de un cabezazo de Paunovic que salió por encima del larguero, el resto del primer acto rozó lo patético. Se jugó sin ideas, sin conexión, sin líder y sin confianza. El gol de Van Hoogdalem terminó de enterrar a un grupo que echaba un vistazo al área técnica y se encontraba con un Bernd Krauss incapaz de saber ni qué hacer ni qué decir.

El equipo exhibía el mismo comportamiento que en la Liga y con el gol en contra, en lugar de reaccionar, prosiguió redactando un guión terrorífico. El miedo se apoderó de los futbolista que tenían en frente a un grupo de jugadores que le echaba fe, bastante más garra y que, al menos, tenía un esquema más o menos definido, pero tenía esquema. El Mallorca, ni eso. Pero lo peor estaba por venir y llegó todo de golpe y sin que nadie se llegara a creer lo que estaba ocurriendo. Nadal cometió un claro penalti sobre Asamoah. El central quedó seriamente dañado y tuvo que ser sustituido.

Cero a dos, indignación en la grada, pañuelos en Son Moix con dirección al palco y el desastre, siendo un hecho, llegó a ser total cuando Samuel Eto'o, otra vez Samuel Eto'o hizo de niño malo, metió un cabezazo a un contrario y el árbitro le expulsó. El equipo se quedó con diez, sin Nadal, sin Eto'o y sin nada, sólo con diez jugadores absorvidos por una situación desesperada e incapaces de superar en jugadas determinantes a los rivales.