El penalti. Fue sin duda la jugada determinante del partido de ayer. David Gallo controló un balón en largo dentro del área. Al intentar driblar a Esteban, defensor del At. Balears, recibió una clara zancadilla y el colegiado pitó pena máxima. Tino transformaría el penalti que le dio la victoria a la Peña Deportiva en el derbi balear disputado ayer en el municipal de Santa Eulária. Fotos: GERMÁN G. LAMA

Por fin llegó la reacción. La Peña Deportiva necesitó recurrir de nuevo a un derbi balear para resurgir de sus cenizas como la mitológica ave fénix.

Tras cuatro derrotas consecutivas y con una galopante crisis deportiva azotando los cimientos del club, el bloque de Luis Elcacho volvió a mostrar su carácter batallador en el municipal de Santa Eulària para imponerse por 1-0 al Atlétic Balears. Un triunfo, el quinto en liga (y como local) que aleja a los deportivistas de los últimos puestos de la clasificación, aunque no de la zona de descenso.

El duelo prometía igualdad y tensión. Se medían dos viejos conocidos que necesitaban con urgencia los tres puntos y apuntillar a su rival de cara al futuro.

Quien dio el primer aviso fue el cuadro de Luis Elcacho, que alineó a Tino y a Neftalí en lugar de Adrián Ramos y Villodre, respectivamente. El resto, los de siempre. Ondina, cuando se cumplía el minuto y medio de encuentro, aprovechó desde la frontal un rechace de Emilio para disparar raso y ajustado, pero el guardameta tiró de reflejos para llegar al balón.

Antes del 10' de partido el At. Balears se adueñó del balón y de las oportunidades. Aarón desde la banda izquierda y Lucas Pou en punta comenzaron a aparecer. Pero fue Esteban quien pudo adelantar a los suyos en un remate a bocajarro tras un córner que cabeceó primero Lucas, y que desbarató la zaga local en ambas ocasiones.

Poco después, el propio Lucas enganchó dentro del área un mal despeje de Buti; dribló a Neftalí y picó sutilmente la pelota ante la salida desesperada de Moro, pero la suavidad del toque la aprovechó la defensa para sacar bajo palos el 0-1.

Demasiados avisos para una Peña Deportiva que poco después (min. 18) perdía a Nacho Jara por lesión. En su lugar salió Raúl Gómez quien, al menos en la primera mitad, no aportó nada nuevo. Tampoco lo hizo el capitán Tino, perdido en la media punta y a un abismo de David Gallo, el solitario delantero.

Las tímidas reacciones locales llegaban a balón parado y en las botas de Ondina. En el 24', Buti remató en el segundo palo un evío del asturiano, pero Emilio detuvo sin problemas. El partido alternaba poseedor del balón, aunque siempre fue el Balears quien mejor intentó tratarlo. A cuatro minutos del descanso, Toni Coll inició una gran internada desde la izquierda; su centro por raso al área lo controló Lucas, que lanzó un latigazo a la escuadra. El rechace los escupió la defensa a córner. El once de Francisco se acercaba y la Peña pedía el descanso.

Y le vino bien el paso por los vestuarios al conjunto ibicenco. Buti volvió a cabecear a la salida un saque de esquina, pero Esteban, atento junto a su portero, despejó el esférico. La Peña salía otra vez a presionar, y esta vez Luis Elcacho lo tenía claro. Su equipo necesitaba otra referencia en ataque, de modo que el catalán dio entrada a Adrián Ramos en lugar de Fonsi, lateral izquierdo. Se trataba de una apuesta netamente ofensiva.

Sin embargo, el bloque mallorquín no renunciaba a la victoria y Aarón pudo adelantar a su equipo en una buena combinación por la izquierda que acabó en un disparo defectuoso.

La resolución

Era el preludio de la jugada decisiva del partido. Gallo mató de forma magistral dentro del área una pelota en largo de la defensa de Santa Eulària. Orientó el cuero y quebró a Esteban, quien lo zancadilleó antes de que pudiera armar el disparo. Tino engañó a Emilio y estableció el 1-0 (min. 61).

En ese instante, Luis Elcacho introdujo a Villodre en el centro de la zaga y adelantó la posición de Neftalí para dar más fortaleza al medio campo. El dagnificado fue Raúl Casañ, más apagado que en otras ocasiones.

Tras el carrusel de cambios, Tino tuvo la última para la Peña en un disparo lejano que trataba de sorprender a Emilio (min. 80). Desde ese momento hasta el final el At. Balears buscó el empate. Pero quizá de forma muy pausada. Lejos de amedrentar a la Peña con balonazos a la olla, los de Francisco se dedicaron a tocar en corto y a intentar avanzar a base de triangulaciones. Una apuesta interesante, pero poco efectiva.

La Peña aguantó el resultado y logró por fin romper con una racha de cuatro derrotas consecutivas. Luis Elcacho vuelve a llevarse un derbi, y su equipo se aferra de nuevo a la liga.