En la Peña Deportiva de Santa Eulària se respira absoluta tranquilidad. En el club reina la calma chicha. Tras la experiencia vivida el pasado verano, cuando en apenas 15 días hubo que confeccionar casi por completo un equipo para Segunda División B, la dirección deportiva quiere tomarse con mucha paciencia la confección del futuro vestuario del equipo en Tercera División.

Toni Torres, encargado de la planificación deportiva, aseguró ayer que «no hay día de reunión con el entrenador». La continuidad de Cristóbal Parralo sigue en el aire, aunque todo apunta a que el futuro patrón del navío peñista será otro.

Después de la última cena celebrada por la directiva junto al cuerpo técnico y la plantilla el pasado lunes, la secretaría técnica prefiere dejar pasar unos días antes de retomar las conversaciones con los futbolistas y el técnico de cara al próximo curso. En esta ocasión «no hay prisa», como apunta Torres, por lo que el impasse podría perdurar hasta la próxima semana.