España dio una lección de fútbol a Bélgica para acercarse aún más al Mundial 2010, el día que Del Bosque inventó un nuevo dibujo táctico, 4-3-3, en el que Silva recuperó su mejor versión y Piqué se convirtió en el jefe de la zaga con un partido inconmensurable.

Desde ahora, España sabe jugar con un nuevo dibujo. Tiene un nuevo sello. Otra variante. La que ha creado Del Bosque para seguir juntando, con éxito, a Villa y Torres. Para mantener el estilo de toque, aderezado con desplazamientos en largo de Piqué o Xabi Alonso. Un 4-3-3 bajo el que la 'Roja' empequeñeció a una Bélgica que se despide del Mundial 2010.

Con el estreno de un nuevo dibujo España aplastó a Bélgica. Con Iker Casillas como espectador, Piqué fue el capo de la zaga con un poderío arrollador. Alonso construyó. Xavi inventó. Silva fue un diablo. Fernando Torres estuvo en todos los lados. Y Villa, sacrificado en la izquierda, desequilibró.

Con el mando y un fútbol repleto de velocidad, España se adueñó del balón y no paró de generar fútbol. Necesitaba un encuentro brillante Silva. Lo pasó mal en la Confederaciones, aún dolorido de la lesión de tobillo que amargó su pasada campaña. Con la pretemporada finalizada reaparece con su mejor fútbol.

Ocasiones

El vendaval de juego español se transformaba en peligro de gol cuando el balón pasaba por Silva o Villa, que tuvo las dos primeras ocasiones. Había dejado Torres dos jugadas marca de la casa. Desborde en velocidad, recorte y pegada, cuando Villa inventó un penalti. En el lanzamiento se topó de nuevo con Gillet, que sacó con las piernas el disparo potente.

No rebajó el fallo el ímpetu de España que, tras un disparo ajustado al palo de Silva, acabó por abrir la lata en una acción de Villa, con Torres llevándose a los defensas con un desmarque, y Silva aprovechando el espacio para aparecer por sorpresa y cruzar el disparo a la red (min.41).

El vendaval de fútbol se prolongó nada más reiniciarse la segunda parte. Villa se quitó la espina marcando con un disparo con la derecha ajustado al palo -después de tres partidos sin marcar y fallar el penalti- y Piqué premió con gol su partidazo. En él nació la jugada, que pasó como todas por Xavi, quien encontró a Villa en la izquierda para dar su segunda asistencia de gol del partido a Piqué. Con la templanza del punta, mató el balón y definió con calidad.

Nunca se frenó la 'Roja' en el segundo acto, pese al abultado triunfo. Torres buscó el gol pero de nuevo rozó el palo con un disparo lejano y Gillet se lució a disparos de Xabi Alonso y Cesc.

Nada pudo hacer de nuevo ante David Silva, con un chut colocado, ni con el último de la noche, firmado por Villa a puerta vacía gracias al regalo de Cesc. España se gustó en uno de los partidos más completos desde que arrancó la 'era Del Bosque'.