El Palacio de Congresos de Ibiza parece condenado a no tener esta temporada ni una semana de tranquilidad. Ni siquiera la victoria del pasado sábado ante el Real Canoe (66-54), la primera de la temporada, ha estado exenta de polémica, en este caso el bajo rendimiento de la pívot norteamericana Lori Nero. La junta directiva del CB Puig d'en Valls se reunió ayer por la noche para decidir, entre otros temas, el futuro de la jugadora en el club. La intención del club es dar la baja a la jugadora, aunque el problema es el alto coste que supondría rescindir su contrato. «No me gusta trabajar con gente que no está implicada al cien por cien, sobre todo porque estamos en un momento difícil. Creía que la llegada de Nakia Sanford iba a ser una ayuda para Nero, pero parece que nada le va bien. Habría que preguntarle si realmente quiere estar o no en el equipo», manifestó tras el partido del sábado Jenaro Díaz.

Permanencia

Por otra parte, la victoria ante el Canoe permite quitar presión al equipo y empezar a pensar en recuperar posiciones en la tabla. Este sábado toca visitar la pista del Ros Casares, un partido que prácticamente se da por perdido, por lo que la reacción debe llegar a partir de entonces. «El objetivo es terminar la primera vuelta con tres o cutro victorias, lo que supone ganar todos los partidos de casa (Hondarribia y Uni Girona) e incluso el de fuera ante el Sóller mallorquín», reconoció Vicente Torres, presidente del club ibicenco. Tradicionalmente, la barrera de la salvación son siete u ocho partidos ganados, si bien el Estudiantes se salvó la pasada campaña con sólo 6 triunfos en su haber.