La publicación de los presupuestos de Balears para 2012 ha acabado por confirmar el recorte ejemplar en el deporte de las islas. El proyecto presentado ayer por el Ejecutivo ante el Parlament fija un presupuesto de 19.003.322 euros para la Direcció General d'Esports, de los que 16.052.695 son para el propio ente y el resto para Príncipes de España (1.551.359) y Calanova (1.399.268). Las cuentas de la Comunitat han priorizado las deudas pendientes, en especial bancarias, junto a aspectos como la tecnificación los Jocs Escolars, los desplazamientos y los deportistas individuales.
El tijeretazo más sonado llega en la Fundació Illesport, lastrada por una póliza de crédito de unos doce millones de euros que genera unos elevados gastos financieros. De cara a 2012, contará con 6'3 millones de euros, de los que más de la mitad cubrirán el préstamo sobre el Palma Arena. El capítulo de patrocinios sufrirá una rebaja ostensible, en especial en el caso de los clubes deportivos de élite, que dispondrán de cerca de un millón de euros -en la temporada 2010/11 eran casi tres-, mientras que los deportistas individuales recibirán unos 500 mil, además de destinarse 50 mil a patrocinio y colaboración en eventos.
Catástrofe
La rebaja estimada en más del 60% de los importes de patrocinios invita a pensar en un descalabro de los clubes, muchos de los cuales viven situaciones insostenibles ante el endeudamiento institucional, que se remonta al pasado curso. De cara a las cantidades pendientes de entonces, un plan de pagos de Vicepresidencia Económica debe ayudar a saldar las cifras pendientes.
Las previsiones presupuestarias de Esports permiten adivinar un futuro negro, planeando la renuncia o desaparición de muchas de estas entidades.
Entre las demás partidas, destacan las destinadas a tecnificación, a través de la EBE (3'7 millones), pendiente ésta de fusionarse con Illesport, además de una destinada a los traslados de deportistas, de 1.450.000 euros y otra para los ayuntamientos, de 294.627. Los ingresos apenas son de 1'6 millones.

Desde Eivissa lamentan que no se les haya avisado con anterioridad
Los representantes de clubes ibicencos coincidieron ayer en su valoración sobre el anuncio de recortes por parte de la Fundaciò Illesport por valor superior al 60 por ciento de las ayudas a clubes de élite para esta temporada.
El presidente del CB Puig d'en Valls, Vicente Torres, calificó de «varapalo tremendo» el tijeretazo institucional, aunque prefiere mostrarse cauto y expresar su valoración cuando exista una comunicación oficial de dicho recorte. En esta misma línea se movió el presidente del Space Tanit, José María Costa, que exigió equidad en el reparto haciendo alusión al presunto trato de favor con el RCD Mallorca.
Ambos coincidieron, al igual que el responsable del Space Tanit Juan Ortiz, en lamentar el retraso en el anuncio de este pronunciado descenso en las subvenciones por parte del Govern Balear. «Podían haber avisado hace tres meses. Uno hace números y puede renunciar o tirar para adelante, pero cuando estás a mitad de competición el problema es muy serio. Nos van a abocar a la desaparición de un club con tantos años de historia», indicó el gerente del club de fútbol sala, al que se le adeuda más de 200.000 euros en concepto de ayudas institucionales.
La postura de las entidades pitiusas consultadas es aguardar a una confirmación oficial de este recorte del 60 por ciento en ayudas a clubes de élite para expresar sus impresiones y acordar algún tipo de encuentro o reunión con responsables políticos para trasladarles su preocupación. Lo que parece evidente es que esta temporada puede convertirse en un auténtico calvario para la mayoría de ellos.