Paolo Etamané será de nuevo la referencia ofensiva del Isleño. | Marco Torres

El campo municipal de Coll d'en Rabassa, feudo del Collerense en la capital mallorquina, será esta tarde el escenario de una nueva batalla por escapar de la zona baja para el Atlético Isleño, decimotercer clasificado con solo tres puntos de ventaja por encima del descenso.
El Collerense comparece herido tras cosechar la pírrica cifra de cinco puntos de los últimos 24 disputados. Merced a ese bajón que se prolonga desde el pasado 8 de enero, el colectivo de Jaume Tugores ha descendido hasta el undécimo puesto de la clasificación, con solo cinco dígitos por encima del plantel de Pepe Arabí y Jaume Mascaró.
El barco azulón tratará de mantener la efectividad ofensiva que mostró hace cinco días en Can Misses frente al Alaior (5-2), donde consiguió materializar sus ocasiones de ataque y plasmar con una goleada su buena propuesta futbolística en la mayoría de jornadas.
No obstante, el desafío para los ibicencos será conseguir sumar tres puntos a domicilio, circunstancia que no se produce desde el 5 de noviembre, cuando batieron, contra pronóstico, al Poblense (1-2).