El fútbol sala insular sigue en guerra. Si no es por una cosa, es por otra. Si hace poco hubo un roce por el hecho de que el Gasifred Atlético, el Consell d’Eivissa y los distintos ayuntamientos de las Pitiüses vayan a organizar actividades escolares de promoción, algo que no caló bien en la delegación ibicenca de la Federació de Futbol Illes Balears, ahora las críticas llueven sobre el nuevo responsable insular de fútbol sala, Rafa Albert, que está promocionando entre los clubes ibicencos la liga privada de San Pablo que él mismo gestiona.

Rafa Albert lleva un par de ediciones en la gestión de dicha competición privada, pero recientemente ha sido nombrado responsable de fútbol sala en la federación para levantarlo. Algunos clubes no ven con buenos ojos que se encuentre fomentando su liga privada en vez de centrarse única y exclusivamente en su nueva competencia federada. «A nosotros nos ha dicho que nos apuntemos a la liga de San Pablo y que, si luego sale adelante la Regional, juguemos en los dos sitios», afirmó ayer Estefan Lanchón, coordinador del Vitamelo Peña Deportiva.

«A nosotros nos interesa que haya una Regional sénior para poder subir jugadores al primer equipo. De hecho, llamamos a Rafa porque los chicos quieren esa competición», continuó Estefan, que piensa que «ya es tarde para montar ligas federadas». «De hecho, el delegado federativo lo debe ver igual, porque está organizando una liga privada. Tiene el derecho de hacer lo quiera. Faltaría más. Eso sí, que no nos ilusionen más», denunció.