órriz, a la derecha recibiendo una entrada, fue protagonista en la recta final del primer tiempo, cuando fue agarrado por Marc Torres dentro del área y el árbitro no interpretó que hubiera penalti.

FORMENTERA: 0

COLLERENSE: 0

El Formentera se quedó con las ganas de poner tierra de por medio en lo alto de la clasificación. Al equipo rojillo se le mojó la pólvora justo en el partido en el que había decidido apostarlo todo en ataque, saliendo con dos puntas. Pese a ello, el Sóller se salió con la suya e hizo bueno su apodo de rey del empate.

Luis Elcacho alineó de inicio a Jorge Brazalez, delantero fichado en el mercado invernal, junto a Górriz en la punta de la lanza. La intención no era otra que dotar de mayor poder de definición a una escuadra que, si bien es un muro inexpugnable en defensa, está pasándolo muy mal para ver puerta. La idea parecía buena, pero, ayer, no dio resultado.

El conjunto mallorquín demostró ser una roca, un equipo con argumentos suficientes como para ceder muy pocas derrotas esta temporada. De hecho, sólo ha hincado la rodilla en tres ocasiones. Es cierto que los locales gozaron de las mejores ocasiones y que el palo se cruzó en su camino en dos ocasiones, pero también que los visitantes vivieron una odisea para llegar al campo –el encuentro se retrasó una hora– y que tuvieron difícil mantener la concentración.

Los de la pitiusa menor comenzaron mandando en el campo, llevando el peso del partido y buscando la portería ante un Sóller que tenía clara su misión: aparcar el autobús atrás. Mourad probó fortuna a los tres minutos con un disparo lejano y Micaló, poco después, no enganchó bien el balón en el área pequeña en la siguiente aproximación con peligro.

Acoso

En el ecuador, Bernal también tuvo la oportunidad de romper el ‘cerocerismo’. Górriz centró desde la banda y el zurdo acabó disparando con su pierna mala desde el punto de penalti. El final ya se puede deducir cuál fue. Los mallorquines necesitaron más de media hora para crear su primera ocasión, pero, eso sí, fue la más clara del primer tiempo. Álex botó una falta y Tuni, completamente solo, cabeceó a las manos de Contreras. Menos mal.

Cuando el partido encaraba su recta final, Imanol estuvo a punto de estrenar el marcador. Cazó un balón en la frontal del área y lo golpeó con violencia hacia la meta, donde Ramón se lució enviando el balón a córner. Al filo del pitido final se produjo la jugada polémica de la mañana. Górriz dribló a Torres en el área pequeña y, cuando se disponía a disparar, el defensa le agarró del pantalón. El vasco cayó al césped sin que el árbitro interpretara que hubo penalti para desesperación de la grada.

En la segunda parte, más de lo mismo. Los de Luis Elcacho se dedicaron a buscar el gol ante un Sóller ultradefensivo. Y estuvieron a punto de conseguirlo, pero el resultado fue el mismo.

En este periodo, el poste se alió con los mallorquines por partida doble. Primero, una bonita chilena de Jorge Brazalez la escupió el travesaño. Ya en el tiempo de prolongación, otro remate de Larra encontró el palo como destinatario, esfumándose así la oportunidad de sumar tres puntos. Sin gol no hay paraíso.