Una imagen de los entrenamientos de la Pujada a sa Cala de Sant Vicent. | Marcelo Sastre

‘JJ’ Fernández mandó ayer un mensaje a sus rivales en los entrenamientos de la XXXIV Pujada a Sa Cala de Sant Vicent. El piloto ibicenco quiere ganar en casa por primera vez en su carrera. En la segunda tanda de entrenamientos hizo volar su Silver Car EF10 para firmar un registro de 02:12.717 en los cuatro kilómetros de subida por los 02:16.690 de Jaime Carbonell y los 02:19.972 de Pedro Mayol.

Lo cierto es que la terna de favoritos no exprimió sus vehículos al máximo. La hora de la verdad llegará esta mañana con la competición, donde los tiempos bajarán sensiblemente. Eso sí, es complicado que se acerquen al récord de 02:02.373 que firmó Andrés Vilariño en 2017.

La ausencia del veterano piloto abre las puertas para que este año la Pujada tenga un nuevo vencedor. Así lo espera ‘JJ’. El ibicenco, segundo el año pasado, se muestra confiado por conseguir llevar a sus vitrinas un trofeo que le falta. Sabe que ninguno de sus rivales tienen los tiempos que él ha ido firmando a lo largo de los años.

Tras estas dos primeras tandas de entrenamientos, la emoción regresará esta mañana con la tercera y última sesión para poner a punto los vehículos. Ésta tendrá lugar a las 09.00 horas. La competición propiamente dicha comenzará a las 10.30 horas, cuando Mari Pau Huguet abra la carrera con el coche cero. Tras ella, subirán uno a uno todos los participantes. La segunda manga competitiva está programada para las 12.30 horas.