Raúl Casañ durante el partido contra el Langreo. | Toni Planells

La Peña Deportiva vive con la tranquilidad del trabajo bien hecho, pero sin relajarse. «Hay que estar orgulloso de estos jugadores, que se lo dejan todo en el campo. No puede ser de otro modo para lograr el objetivo, pero hay que seguir, porque aún no hemos hecho nada», señaló ayer Raúl Casañ.

El técnico peñista ya ha pasado página de la derrota en tierras canarias y está completamente centrado en el encuentro de mañana (12.00 horas) ante el Rayo Majadahonda. Casañ quiere que su equipo vuelva a mostrarse fuerte en casa, como lo lleva haciendo toda la temporada, pero sabe que el rival no es nada sencillo: «Hay que ir a por los tres puntos porque jugamos en casa y la salvación pasa por Santa Eulària, pero debemos tener mucha precaución y mucho respeto por un rival muy fuerte. Viene un equipo que es de Segunda A».

En esa misma línea, el valenciano aseguró que tenían ganas de medirse a un contrincante de ese poderío ante su público. Como es habitual, el técnico no quiso oír hablar de la tabla clasificatoria ni de recuperar la plaza de playoff: «Nos trae sin cuidado la fase de ascenso. Evidentemente, queremos estar lo más arriba posible, pero tenemos que pensar en consolidar la salvación cuanto antes. Estamos haciendo las cosas bien, pero aún queda mucho. Nosotros queremos ganar siempre, pero teniendo los pies en la tierra».

Por último, analizó al Rayo Majadahonda línea por línea: «Tiene jugadores de ataque muy determinantes como Rubén Mena y Moyita, y en el centro del campo y la defensa cuenta con jugadores de mucha experiencia y que son muy fuertes. Es un equipo muy completo y nos lo pondrá muy difícil».