David Barca, hundido tras el pitido final. | Marcelo Sastre

La Peña Deportiva tendrá que pelear con los de abajo por evitar el descenso a Tercera. La derrota contra el Atzeneta por 0-2 dejó ayer a los peñistas sin la posibilidad de asegurarse su continuidad en Segunda RFEF e incluso aspirar a Primera RFEF. Ahora, la fase de promoción por el descenso es la que le espera.


No pudieron comenzar peor las cosas para los de la Villa del Río. Primera aproximación de los visitantes, primer gol. Apenas habían transcurrido 45 segundos cuando Álex Chico adelantó al equipo de David Albelda. Tras una acción prolongada de cabeza en un saque de banda, el delantero superó a Seral con una chilena en caída que desató la euforia en el banquillo visitante.


El tanto sentó como un jarro de agua fría al conjunto de Raúl Casañ, que estaba totalmente irreconocible. Los santaeuarienses eran incapaces de generar peligro en ataque ante un conjunto valenciano mejor situado. Los minutos pasaron con más pena que gloria y daba la sensación de que mucho tenía que cambiar el decorado para que llegase el empate.


Sin ideas
La Peña Deportiva no estaba funcionando ni a nivel colectivo ni individual. Con todo, en la recta final apretó y buscó la igualada. Cruz fue el que más cerca tuvo las tablas después de cazar un balón en el área y disparar fuera. Al cuadro de la Villa del Río le dio un arrebato ofensivo y Loren y De Val probaron fortuna acto seguido con sendos disparos exteriores que no vieron puerta.


Tras el descanso, y tras un tempranero susto de los visitantes, la Peña lo intentó con más pena que gloria. Aarón ocupó de inicio el lugar de Colau y poco después entró Antonio por Fran Núñez con la intención de tener más presencia física arriba y tener más opciones con el juego directo. El ariete, de hecho, no tardó en gozar de su primer oportunidad. En el 60, disparó fuera en el interior del área.


Ocasión de Barca
Los minutos pasaban y la Peña no encontraba la manera de romper el entramado defensivo de un Atzeneta que sólo le vio las orejas al lobo en una oportunidad aislada de Barca que el zaguero abortó con su cuerpo.


Cuando el partido agonizaba, Javi García puso la puntilla. En un error de De Val a la hora de despejar por el costado izquierdo, el jugador del Atzeneta se quedó con la bola y lanzó un espectacular disparo con rosca que tocó en el palo antes de alojarse en las mallas. De esta forma, el conjunto de Raúl Casañ hincó la rodilla y tendrá que pelear por evitar el descenso a Tercera en la próxima fase.